- El dueto Nameless amuebló sus propios sueños, en los Miércoles de Concierto de la UAS
Trasponiendo aquello de luna que se quiebra sobre las tinieblas de mi soledad, pero sin embargo respetuoso de aquel bolero que solía cantarse en las serenatas de antaño -porque no se resistió a interpretar Sabor a mí, de Álvaro Carillo-, el Dueto Nameless le puso su propio romance a los Miércoles de Concierto de la UAS, es decir, a partir de la concepción actual del amor, de acuerdo a la forma como los jóvenes han reinterpretado la bohemia, con canciones de su tiempo, con letras que dibujan de cuerpo entero el sentir y el amar contemporáneos.
Porque tienen el derecho de amueblar sus propios sueños, los integrantes de Nameless sedujeron al público que se dio cita en el auditorio Juan Eulogio Guerra Aguiluz, de Radio UAS, con el tipo de temas con que la juventud comunica sus sentimientos, como por ejemplo una letra del repertorio de Los Auténticos decadentes, titulada ‘Loco’, que habla de un varón que mira entrar, a un bar, a la chica que le gusta; y que ésta se cae al piso -ha de suponerse que pasada de copas- y que de repente ella le avienta con un pingüino. Y cosas así.
Nameless también incluyó algo de Extremoduro, ‘Rojitas las orejas’, que refiere todo lo que puede significar un sencillo beso, visto como un veneno que tanto quita la vida como transportar a la luna, o como droga que todo lo cura y viene a convertirse una “dependencia bendita”. Y si ha de hablarse de canciones pop en el tope de los éxitos latinos, interpretaron la ‘Antología’, de Shakira, más fácil de digerir, aunque anota eso de que, junto a ti, “aumenté más de tres kilos con tantos besos repartidos”.
Con la presencia de Nameless en los Miércoles de Concierto, la Coordinación General de Extensión de la Cultura, la Unidad Académica de Artes y Radio Universidad, dejaron sentir la apertura de los recintos institucionales para que las voces jóvenes, en este caso a Franchesko Pérez y Valeria Zamudio, manifiesten su sentir a través de la música, la libertad para que romanceen de acuerdo a lo que la juventud escucha y canta en sus reuniones amorosas o de bohemia amistad.
En total, fueron alrededor de 15 temas los que Nameless incluyó en su velada musical; incluso en inglés, como el emblemático ‘Crazy Little thing’, de Queen, que formidablemente puso al público a llevar el ritmo con las palmas, justo en una parte de la canción en que el dueto cantó a capella. Fue su noche y fue su romance.
