El guitarrista participa como invitado en el programa Entre sonidos y silencios que conduce Aldo Rodríguez.
El músico compartió que fue durante su adolescencia que empezó a tocar la guitarra por curiosidad y no se dio cuenta cuándo se dio esa transición, esto durante su participación en el programa Adscrito a la barra digital de la Coordinación General de Extensión de la Cultura y la radiodifusora institucional.
En transmisión emitida a través de las cuentas Radio UAS y Cultura UAS respectivamente, el músico de origen sinaloense, pero radicado en Helsinki, Finlandia, se encuentra de gira por tierras mexicanas, mismas que desde hace seis años no pisaba y aprovechó la oportunidad para visitar el inmueble universitario.
Detalló la agradable experiencia de haber participado como guitarrista para la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes con un concierto de Manuel M. Ponce y los vestigios de algunos acordes que sacan a relucir el origen del compositor en el Concierto del sur (de España).
Agregó que en sus inicios, le tocó recibir la guía de grandes músicos de la Escuela de Música como Heriberto Soberanes, pero también del guitarrista Francisco Félix, quien le dio su primera partitura de un estudio.
Sobre su llegada al país nórdico, precisó que el choque cultural fue al mes de estar residiendo ahí, ya que al inicio dijo sentirse como un turista en un país exótico, además de “todo funciona de la manera opuesta, desde el horario hasta el clima”.
De sus estudio de posgrado y permanencia en ese país dijo “uno hace un plan y la vida determina si es por ahí o no es por ahí, por eso aprendí a hacer planes no muy definitivos, porque aprendí que uno quiere algo y finalmente va a suceder otra cosa, que no es mejor ni tampoco es mala”.
Asimismo, el también egresado de la Escuela de Música dijo pertenecer a un grupo de Son jarocho, ya que en Helsinki radica una notable comunidad mexicana, predominantemente veracruzana muy unida y con mucho arraigo en su cultura musical.
Respecto a proyectos a futuro, hizo hincapié en que tiene algunos conciertos en Culiacán, Mazatlán e incluso Colima a finales de noviembre y principios de diciembre, para posteriormente pasar las fiestas en su terruño y “volver a la oscuridad”.