The Orchestra, antes ELO, este sábado 21 de mayo.
Cantarán además el trovador Francisco Robles y la Estudiantina Universitaria
La vigésima primera edición del Festival Internacional Universitario de la Cultura presentará este sábado 21 de mayo, a las 20:00 horas, a The Orchestra, una banda de rock formada por ex miembros de la emblemática Electric Light Orchestra y ELO Part II, por lo que sus miembros cuentan con una historia sólida en el mundo del rock clásico.
Fundada en Birmingham, Inglaterra, en 1970, con la voluntad no poco ambiciosa de crear un sonido desde donde Los Beatles lo habían dejado, Electric Light Orchestra (ELO) logró vender 50 millones de discos y colocar 30 increíbles hit-singles.
Es una de las bandas más exitosas de la era gloriosa de rock clásico, legando temas deliciosamente sinfónicos, con arreglos de Louis Clark, como Telephone line, Evil woman, Last train to London, Can’t get it out of my head y Strange magic.
En The Orchestra figuran los miembros de Electric Light Orchestra, como Mik Kaminski, siempre con su famoso violín azul y Louis Clark, arreglista y teclista de la orquesta, así como ex miembros de Electric Light Orchestra Part II.
Por otro lado, el Tatuas pondrá de nuevo en escena La indescriptible, la más fea, de Cutberto López, una obra inspirada en la vida de Julia Pastrana, a las 18:00 horas, en el Teatro Universitario.
Ba
jo la dirección de Rodolfo Arriaga, este montaje habla acerca de la maternidad, de los miedos de Marisol y Javier, una joven pareja que se enfrenta a la incertidumbre de ser padres. El elenco está integrado por Marichú Romero, Genaro Sahagún, Marcela Beltrán, Eduardo Arriaga y Aurelio Osuna
La programación del Festival también contempla para este jueves 20, a las 18:00 horas, la celebración del 50 aniversario de la Estudiantina de la Universidad Autónoma de Sinaloa, en el Auditorio de la Facultad de Contaduría y Administración.
Además el trovador Francisco Robles ofrecerá un concierto a las 18:00 horas, en la Casa de la Cultura Miguel Tamayo, quien traerá consigo la esencia de las entrañables peñas donde sólo había que levantar la mano para hacer más grande la bohemia.