La carta de presentación fue un tema del legendario bajista Pepe Hernández, I wanna funky Me, y fue aquello casi un exceso de virtudes entre quienes compusieron el quinteto que el baterista Iván Núñez, este año, conformó para brindar uno de los conciertos más memorables de jazz de los últimos tiempos, presentado en el marco del XXIII Festival Internacional Universitario de la Cultura.
No se ocupaba ser docto en música, ni siquiera seguidor del género jazz, para vivir cada nota y cada instante que los propios artistas transmitían desde el escenario, metidos a profundidad en la ejecución de sus instrumentos, correspondidos por el público con las palmas, ritmo a ritmo.
Los cinco, definitivamente profesionales, hicieron lucir por qué cantantes como Emmanuel, Bianca Marroquín, Luis Miguel, Ricardo Arjona y David Bisbal, los contemplan en sus bandas; y más que ello, espíritus libres que al gozar con lo que tocaban, al mismo tiempo proveían la llave mágica para abrir los corazones de quienes se dieron cita en la explanada del Edificio Central de la UAS, por la tarde-noche del lunes 21 de mayo, en lo que vino a ser el día 17 de celebraciones por el 145 aniversario de la fundación de la casa de estudios.
En el desarrollo de cada pieza, cada quién mostraba su excelsitud, como el propio Pepe Hernández, en el bajo, lo mismo que Iván Núñez, en la batería; Luis Rey, en la guitarra; Aurelio Loyo, en el teclado; y John Barrera, en el saxofón.
Entre los temas que la concurrencia pudo disfrutar, están: Big body girl, Back home, Stratus, Friendship; y la clásica What is hip, de la banda estadounidense de funk y soul, Tower of Power, entre otras, por supuesto a cargo de Iván Núñez Quintet, esto es, el duchado de cinco espléndidos músicos en el Festival de la UAS.