- La también autora de los libros ‘¡Qué niños tan teatreros!’ y ‘A jugar Teatro’, participó en la barra cultural online de la UAS
La actriz, directora, creadora escénica y escritora, Haydee Boetto, dijo que tanto los actores como los creadores tienen el deber de encontrar lo que quieren y buscar la manera de hacerlo llegar al público; asimismo, que deben generar un discurso y un lenguaje propios, reconociendo que es un camino difícil, pero a la vez muy satisfactorio, “porque es algo que generas tú desde muy adentro”, para luego citar a un dramaturgo mexicano, quien decía que “los actores deben escribir”, dado que conocen muy bien el fenómeno escénico.
Autora de los libros ‘¡Qué niños tan teatreros!’ y ‘A jugar Teatro’, Haydee Boetto fue la invitada especial de los Lunes Culturales, versión digital, que forman parte de la barra online de la Coordinación General de Extensión de la Cultura de la UAS, donde Fernando Mejía y Alberto Bueno representaron el papel de anfitriones.
Con la participación como actriz en más de 50 montajes, dirigida por los directores más reconocidos, se definió a sí misma como ‘multitarea’, habidas sus diversas facetas artísticas, aunque en primera instancia se definió como actriz. “La base de mi vida, mi columna vertebral, mi profesión, es la profesión de actriz”, dijo.z
Nombrada en 2019 como Directora de Programación Artística en el Centro Nacional de las Artes, Haydee Boetto, hija de la titiritera Raquel Bárcena, contó los orígenes de su vida artística tras una accidentada transmisión por Facebook Live a través de la cuenta Cultura UAS; y además confesó que tiene una “relación de amor total” con la ciudad capital del estado, aunque sin poder haber descifrado el por qué; pero, dijo, “tal vez porque es el Culiacán de las maravillas”, en alusión a una frase de Óscar Liera, que había citado Fernando Mejía, Director Académico Cultural de la UAS y creativo del Grupo Guiñoleros.
Quien obtuviera la presea ‘Revelación femenina’ en el año 2000, otorgada por la Asociación Mexicana de Críticos de Teatro, así como el ‘Premio Alas y Raíces’, en 2011, por Conaculta, expuso además que los títeres son un recurso maravilloso del teatro, un lenguaje con el que se puede hacer prácticamente todo. “Para mí es una herramienta maravillosa a la que recurro siempre, porque es un lenguaje que siento que me pertenece, y con el que me siento muy bien comunicando cosas”, ultimó.