• Los especialistas Pedro Cervantes, Jaime Romero y Omar Sicairos hablaron de la temática, estética y técnica en el arte
Se llevó a cabo la Mesa redonda “Tres niveles de la obra de arte” con la participación de Pedro Cervantes Ayala, Jaime Romero Güemez y Omar Sicairos Rodríguez en el marco del XXIX Festival Internacional Universitario de la Cultura.
Pedro Cervantes señaló que esos tres niveles, que son lo temático, lo estético y lo técnico, permiten distinguir las características de una obra de arte en función del resto de las cosas que como humanos hacemos.
En el caso de lo temático, Jaime Romero dijo que no es casual que la dimensión temática de una obra de arte represente un problema más amplio que la simple motivación de artistas que como obligación profesional se encuentran en la posición de crear su obra.
“Bajo esta mirada, la temática sería reducida a una excusa, algo aleatorio de lo que el artista se vale para desarrollar su producción y a la postre su cuerpo de obra (…) afirmar que los artistas solo se dedican a satisfacer su capricho artístico, sería lo mismo que decir que el proyecto de contrarreforma promovido por la iglesia al finales del siglo XVI no tuvo nada que ver con la carta propagandística del arte barroco (…) en otras palabras, los artistas estaban sujetos a las temáticas que la tendencia propia de su contexto consideraba pertinente”, abundó.
Hablar de estética, expuso Omar Sicairos, reposa sobre discursos inexactos por un lado las filosóficos o conceptuales, por el otro sociales, “entonces si la estética es el estudio de lo que determinamos como bello, el mismo no es un término universal, mucho menos fijo, depende de su contexto y habrá de hacer un diagnóstico general de nuestra posición, dicho lo anterior, hay que encontrar un referente de dónde partir”.
Para Cervantes Ayala, la técnica es inherente al arte, “prescindir de la técnica presume la dispersión, el desgaste, el desperdicio de todo empeño de hacer de nuestra existencia funcional, significativa y grata (…) de la relación entre ciencia y técnica, podríamos decir que se complementan, de tal suerte que el perfeccionamiento de una detona el desarrollo de la otra”.