- Vigente, “Vive el Cervantino más allá de Guanajuato”.
- La música de esta agrupación taiwanesa forma parte del World Music.
- Su propuesta es un fenómeno musical que conjuga música tradicional y sonidos contemporáneos
A moving sound es una agrupación musical que surgió en el año 2000. Desde su primer disco se convirtió en todo un fenómeno musical en Asia y más tarde a nivel mundial. En todos los lugares en donde se presentan, llevan al público de la curiosidad al entusiasmo. No es casual que se hayan convertido en pieza clave de los grandes festivales de música, como el que impulsa Peter Gabriel en el Reino Unido.
Su espectáculo, proyectado en formato de video este miércoles 9 de noviembre, a las 10:00 horas, en el Auditorio “Margarita Sánchez de Corona” de la Unidad Académica de Artes de la UAS (Escuela de Música), como parte del programa “Vive el Cervantino más allá de Guanajuato”.
Su propuesta es una afortunada mezcla de música tradicional taiwanesa, china y otros países de la región con música contemporánea, las letras de las canciones hablan de la necesidad de recuperar la espiritualidad, de buscar relaciones más afectuosas con los otros y con la naturaleza, además de que invitan a tomar conciencia social de los problemas que enfrenta el mundo. La revista National Geographic la catalogó como “uno de los grupos más originales que trabaja en el campo de la World Music hoy en día.”
El trabajo vocal de Mia Hsieh es sorprendente. La voz de esta cantante está acompañada generalmente por los ancestrales sonidos del erhu, un violín de dos cuerdas; el zhong ruan, una especie de laúd y otros instrumentos tradicionales de percusiones.
De ahí que conciertos sean una experiencia reveladora, a la contundencia de la música se suma el uso de vistosos trajes tradicionales, y los sinuosos bailes de Mia Hsieh, quien es el eje del espectáculo.
Una de las influencias más significativas de Mia Hsieh es Mederith Monk de quien dice, le abrió la puerta para comprender otros usos de la voz. La música de esta artista norteamericana la ayudó a encontrar su propio estilo. A la cantante taiwanesa le gusta explorar constantemente las posibilidades de su voz, a veces lo hace desde una técnica más académica, pero otras simplemente se deja llevar y permite que las cosas ocurran, lo cual la ayuda a conectarse profundamente con su cuerpo y sus emociones.
A moving sound ofrece también talleres en donde van mostrando los diversos instrumentos tradicionales, la forma en que se tocan y cómo suenan, esto les permite hacer una difusión no sólo del trabajo que realizan sino también de la cultura musical del sudeste asiático.