- Los Sierreños del Vado generaron una fiesta de patio grande con temas del cancionero popular sinaloense
De repente por los alrededores de Radio Universidad en la colonia Gabriel Leyva, se oía aquello de que me dejaste con el alma entristecida y que te llevaste la quietud de mi existencia, al puro estilo norteño, con el fuelle del acordeón yendo y viniendo, atrapando bocanadas de aire y haciendo oír su música por todo cristo a la redonda, dándole un toque de baile popular, de fiesta en patio grande, a los Miércoles de Concierto de la UAS.
Eran Los Sierreños del Vado, era este conjunto que hizo suyo el Portal Lola Beltrán de la emisora universitaria, irrumpiendo con las notas del acordeón, con el sonido del requinto y con el bajo, cantando a dos voces e imponiendo su personalidad desde el primer tema, que trató sobre esos árboles de la barranca y que por qué no habían enverdecido, para luego advertirle a la mujer amada, mediante otra canción, que más valiera que le fuera diciendo a su madre quién era ese hombre que tanto polvo levantaba, pase y pase por su casa.
Era este grupo de sabor ranchero, que se vino “De la sierra a la ciudad” -que fue el nombre de su concierto- invitado por la Coordinación General de Extensión de la Cultura, la Unidad Académica de Artes y la Dirección de Radio UAS, para imprimirle un toque norteño a esta edición del encuentro musical que semana a semana se realiza en las instalaciones de la emisora universitaria, donde caben todos los géneros y también todas las voces.
El público, acomodado en mesas, pudo disfrutar piezas del cancionero popular sinaloense y mexicano, tales como De esta sierra a la otra sierra, Treinta cartas, Ausencia eterna, Flor de capomo, Cruz de olvido y El chubasco, esa que habla de una tal Lupita y que como a las once se iba a embarcar, canción que formó parte de las complacencias de Los Sierreños del vado en su Miércoles de Concierto.
